Con la dueña de casa dominada el ladron se ocupaba de revolver y llenr su bolso de dinero y joyas de Aurelia
Mientras ella solo podia observabar actuar al ladron sin poder hacer nada al respecto debido a los fuertes amarres que habia recibido
Sin emabrgo Aurelia no se iba aquedar de brazos atados y aprovechando que el ladrón fue a uno de los cuartos puso su plan en accion
Con mucho esfuerzo y dolor Aurelia logro bajarse del sillon
Y ya en el suelo tratar de llegar como pudiera a un lado de la ventana
Tratando de salir al balcon y rogar que alguien la ayudara
Finalmente Aurelia logro su objetivo y estaba a punto de salir al exterior, pero era tarde el aldron ya estaba a su lado observandola enojada
Este tomo de los brazos a Aurelia y la volvio a acercar al sillon
Llendo a busvar mas sogas escondidas en su bolso
Para asegurar mas a la escuridiza mujer
El hombre junto los codos de Aurelia y los aseguro con fuerte nudos ante los gemidos de dolor de la mujer
Sin dejar pasar los pechos de la mujer, los cuales ato muy fuertemente
Aurelia gemia mientras el ladron iba su habitacion a buscar algo
El ladron regresa con Aurelia con dos bragas de ella en su mano tomadas de su habitacion y comienza a desanudar la mordaza que la silenciaba
Apenas fue quitada su mordaza Aurelia intento gritar pero de inmediato su boca fue rellenada por esas dos bragas, ahogando sus gritos
Vasrias vuletas de cinta silenciaron por completo a la mujer, la cual no dejaba de gemir
Completamente silenciada el ladron desabotono la blusa de Aurelia
Apoyandola sobre el sillon y volviendola nuevamente sola
Aurelia continiaba luchando y giminedo por su liberacion mientras el ladron terminaba de llenar sus bolsos de las pertenecias de ella
Por mas que lo intentara Aurelia estaba segura que no podria soltarse de tan buenos y apretados amarres
Aurelia sufría atada y amordazada el saqueo de su casa
El ladrón con su bolsa repleta de pertenecías de Aurelia se acerco a ella
Para terminar su trabajo con ella, dejando sus pechos al descubierto
Y así de fácil como entro salió del lugar arrastrando su gran botín y dejando a la pobre damisela gimiendo y luchando por su libertad
Con su casa desvalijada y ella inmovilizada y silenciada Aurelia ahora ponía todas sus fuerzas en escapar de esa situación
Su cuerpo semi desnudo y varios metros de cuerdas aprisionándolo dejaban a Aurelia sin chances de escapar
Ella luchaba y gemía, pero sus gemidos apenas se oían por las bragas dentro de su boca
Aurelia pasaría varias horas en ese estado hasta que finalmente su marido regresara a la casa y se topara con increíble y excitante situación en la que se encontraba su mujer
