Tras en exitoso robo de información en la oficina de Petra, los dos enmascarados se disponían a entregar ese valioso CD a la mujer que los había contratado, la empresaria Calajan. La cual tras entregarles el maletín con el dinero recibía el CD
Sin embargo los dos enmascarados tenían otros planes para la mujer y mirándose entre ellos amenazaron con una arma a la empresaria pidiéndole que se callara y levantara las manos
-Sino quieres que te lastimemos haz lo que te pidamos y quítate el vestido-, Dijo un de ellos mientras el otro asentía con la cabeza
Notando que hablaban en serio la joven y bella empresaria comenzó a levantarse el vestido para así quitárselo
Desnuda y con su vestido tratando de taparla la empresaria cumplió el pedido de estos enmascarados
Los cuales ahora le pedían dejar a un lado el vestido y sentarse en la silla para que también se quitara los zapatos
Pedido que también fue cumplido por Calajan
-Que ahora me robaran el dinero y el CD?- Pregunto enojada la empresaria
-No el CD es tuyo ya que pagaste por el, y tenemos codigos, sin embargo somos ladrones y nos encargaron tu vestido y tus zapatos por los cuales nos pagaran muy bien-, Contesto uno de los enmascarados a su pregunta
Sorprendida por la respuesta Calajan coloco enojada sus manos a la espalda a pedido de uno de los enmascarados mientras el otro utilizaba unas cuerdas para atar esas manos junto con sus pecho, piernas y tobillos
-Lamentablemente tendremos que dejarte atada por un rato para poder salir de esta mansión sin que tu seguridad nos detenga-, Le dijo uno de los dos enmascarados
Aunque Calajan se sentía traicionada podía ver el lado positivo tenia el CD con la información en su poder
Los enmascarados tomaron el vestido y los zapatos de la empresaria y lo guardaron dentro del maletín con dinero para que nadie vea lo que se llevaban
-Solo nos faltaría una cosita para que no llames la atención de los guardias-, Comento uno de los hombres
Y tras esas palabras amordazaron a la empresaria justo antes que intentara gritar
Calajan gemía intentando gritar por ayuda para ya era tarde, los enmascarados tomaron el maletín y salieron por la misma puerta por la que entraron
Sin que la seguridad de la empresaria sospechara algo ya que ella misma había autorizado la entrada de estos enmascarados que ella misma había contratado
Sin embargo nunca imagino que ellos no solo se llevarían el dinero sino que también su costoso vestido y sus lujos zapatos
Dejandole solo lo que ella había pagado el CD con la información que habían robado
La empresaria Calajan estuvo varios minutos así atada, desnuda y amordazada hasta que su seguridad entro, la vio y desato, preguntándole de inmediato si iban tras estos enmascarados
